martes, enero 10, 2017

Capítulo XLIX del Tao Te King

Joaquin Nogueras nos resume la reunión del Cenáculo de diciembre realizada en casa de Isabel Moreno 

Imagen de Isabel Moreno


Capítulo XLIX LOS CORAZONES DEL PUEBLO
El Sabio no tiene ni opiniones ni sentimientos decididos,
Sino que considera las opiniones del pueblo como las suyas propias.
A los buenos los declaro buenos,
A los malos también los declaro malos.
Esto es lo bueno de la virtud.
En los honestos yo creo,
En los mentirosos también creo;
Ésa es la fe de la virtud.
El Sabio habita en el mundo pacífica, armoniosamente.
El pueblo del mundo es llevado a una comunidad de corazón,
Y el Sabio los considera como a sus propios hijos.

Pensamos que este capítulo es difícil de comentar y nos falta el consejo que pedíamos a Peter  cuando ocurría esto. El sabio taoísta no juzga, escucha tanto al mentiroso como al que dice la verdad. No es juez, no decide quién es bueno y quien es malo, confía en todos. Es llevar la no acción (Wu Wei) al máximo, llevar la no acción a las opiniones, sentimientos y pensamientos, el ejemplo lo tenemos en la manera de pensar y actuar de los niños.
 Esta no acción de los pensamientos lo manifestamos en  la canción de la salud: “No pienso mal”. También en la canción de los propósitos decimos: “No pensar, no hablar, no preguntar, No excitarse.” Jesús en el Evangelio nos dice: “No juzguéis y no seréis juzgados”.(Mt 7,1). También dice: “No juzguéis por las apariencias”. (Jn 7,24). El catecismo dice que podemos pecar de pensamiento, de  palabra, de acción y de omisión. Peter añadía pecados de opinión. “Toda cosa buena es maestría y toda cosa mala es una lección.”
El Tao de San José en el capitulo XLIX nos dice: “En medio del bullicio San José sonríe; su corazón tranquilo rebosa paz y armonía.”
J Nogueras