lunes, diciembre 16, 2013

Pablo d'Ors - Peter Yang

Monestir de Santa Maria de Pedralbes

Joaquín Nogueras nos ha preparado este escrito estableciendo puentes entre el pensamiento de Peter Yang con Pablo d'Ors

PABLO d’ORS – PETER YANG
   El  pasado 24 de Octubre tuvo lugar en el Monestir de Pedralbes una conferencia “EL SILENCIO EN LOS TIEMPOS MODERNOS”  de Pablo d’Ors y Cinto Busquets, que la pueden ver integra o resumida en la siguiente dirección: https://vimeo.com/78840162/  (Catalán y ½ Castellano).
  Al leer el libro EL OLVIDO DE SI de Pablo d’Ors, quisiera establecer ciertos paralelismos con Peter Yang. Antes quisiera resaltar que es un libro que engancha, tanto por el tema, la vida de Charles de Faucauld, religioso y viajero, como la narrativa en primera persona. Como describe personajes: El abuelo coronel Morlet, etc. Como describe la naturaleza: El desierto, un arbol cortado, Nazaret etc. Como describe sentimientos, la noche oscura, meditación, religión, etc.
 Paralelismos entre Charles de Foucauld (Pablo d’Ors) y Peter Yang. Ambos son sacerdotes catolicos.  Los dos relacionan sus profundas ideas cristianas con otras ideas religiosas, Peter con el taoísmo y Foucauld con el islamismo: “Los caminos de Dios son inescrutables, seguramente nunca habria accedidoal cristianismo en el que fui educado sin mi fascinación por el Islam.” Peter con su Rincon del Silencio, Fauculd con el silencio de la Trapa y del desierto, Pablo d’Ors con su libro “BIOGRAFIA DEL SILENCIO”. La fe y las formas: “La fe no es en primera instancia una actitud del espiritu, sino del cuerpo; la fe llega por las formas.” Peter tambien integra al movimiento con la oracion, el movimiento del Taichi es una payasada, sino esta acompañado de tertulia y oración. Faucould hace un reglamento de lo que llamaba “Ermitaños del corazon”. Una de las primeras cosas que recuerdo de Peter es: “Tenemos que ser ermitaños en la plaza Cataluña”. Foucauld va a Nazaret y revive la infancia de Jesus. La infancia de Jesus es uno de los temas preferidos de Peter Yang: El Evangelio de San Jose, el viaje a Egipto, los magos de oriente (Orientarse), etc.
   Para mi una de las enseñanzas mas importantes de Peter es “DEGUSTAR LOS DISGUSTOS CON MUCHO GUSTO”, Foucauld (Pablo d’Ors) nos lo explica muy bien: “Todavia no sabia que algunos hombres se crecen con la adversidad, ¡Cuan grande es el trabajo que debe hacer un alma para llegar a agradecer a la adversidad!. Si habéis leído bien, agradecerla. Pues ningun mal esta verdaderamente superado hasta que no vemos como por su medio nos ha llegado algun bien.” “Ya he dicho que hay que dar gracias por las adversidades: es en ellas donde se esconde, clandestinamente, la perla de nuestra salvación.”

Joaquín 

14 comentarios:

Anónimo dijo...

"El misterio último de la vida es un misterio de bondad, de perdón y salvación, que está con nosotros.

Si lo acogemos en silencio, conoceremos la alegría de la Navidad."

Manuel



hilda dijo...

Joaquin, me ha parecido muy interesante este paralelismo que haces entre Peter Yang y Pablo d´Ors.
Un abrazo

Anónimo dijo...

"Li los cristianos tienen el signo de la Cruz, los Musulmanes tienen su doctrina"
Cheikh Elîsh El-Kébir
(

Anónimo dijo...

"Si los cristianos tienen el signo de la Cruz, los Musulmanes tienen su doctrina"
Cheikh Elîsh El-Kébir

Anónimo dijo...

Es el yin-yang de la Cruz junto a las palabras de Carlos de María : “Los caminos de Dios son inescrutables, seguramente nunca habria accedidoal cristianismo en el que fui educado sin mi fascinación por el Islam.”

Anónimo dijo...

Creo que es Alejo que sale en el vídeo al final de todo.
El presentador, que voz tan bonita cuando habla en castellano, y cuando habla en catalán, predomina una hermosa, no sé la palabra, no es entonación, sino que es lo que la melodía es en la música, "eso" que es a la palabra hablada. El ponente catalán parlante, aún sin entender todo el significado, he llegado a entender todo el contexto, hablaba, a mi entender, más de oidas que de conocimiento. El ponente castellano parlante, no hablaba de oidas.
En los primeros minutos se dijo todo.
Después ha sido un ir y venir conla audiencia.
De alguna manera pablo me recordó a San Juan de la Cruz.
La terminología usada por él, es correcta, totalmente correcta para un occidental.
Normalmente el Oriental, o el metafísico (el que sabe de metafísica en lo que esta palabra tiene de sentido etimológico, no filosófico), la terminología de base (no las palabras más empleadas, sino en lo que estas se apoyan) tiene el soporte, el pié, el centro, la referencia invisible, ahí donde el que habla no se escucha y no se ve, y no se toca y no se siente, no porque haya cerrado los ojos y tapado los orificios o aberturas corporales (del TTK), sino porque como Pablo dice, está perdido del todo, y lo que menos sabe y le preocupa es su individualidad, o la individualidad. Es esta la palabra impronunciable, y esta marca el límite de la dialéctica en el hombre occidental.
Aquí es dón siempre he querido llegar, colocarme ahí para dar a conocer ese estado. Estado que es la naturaleza de cada uno que lo tiene o no, naturaleza que es intrínseca al ser personal, pero que ha de haber alguien en quien mirarse para poderlo saber.
Dios entra en el ser individual, más es lo no individual lo que entra en Dios. Es lo no individual lo que no tiene límite alguno.
El límite es el silencio.
Lo no individual es pasar del silencio a la plenitud. Es lo que Pablo quiso de alguna manera decir, sin saberlo precisar porque para él mismo, al mirar a través del silencio, lo denominó de la misma manera, silencio.

Anónimo dijo...

Perdón por tanto reiterar, pero al leer lo escrito, no puedo dejar así mencionado con el significado de perdido, algo que es lo ansiado, lo mil veces concebido y no llegado nunca a poderse imaginar por uno mismo. Mejor sería decir que todo eso de que ni se siente, ni se toca ni se sabe, ni nada de nada, es porque presisamente "Se ha hallado".

Anónimo dijo...

Pero lo más importante de todo es el acto voluntario, (sobre lo que tanto ha insistido Pablo)con uno mismo, de entrar y querer atravesar esas sombras que dan miedo, pavor.
Siendo acto voluntario, se trata de un preoceso de realización a través del silencio (el cero metafísico). Ahí no hay imaginación posible, no hay un hilo sensorial conductor, lo que ahí se desvela es la realidad pura del estado de realización alcanzado. Y eso está más allá de la teología cómo prologo (como se ha mencionado). Creo que el epílogo en absoluto corresponde a la teología, está fuera de su dominio, de su punto de mira, de su objeto de estudio como ciencia, dijéramos que como ciencia, nunca se ha planteado el estudio de algo que está fuera de la mentalidad, de la mente. Esa es la limitación inherente a todo occidente desde las raices mismas de la civilización griega, cuyos dominios de estudio habían dejado en un tiempo muy remoto la pristina pureza y virginidad de una mente primordial

Anónimo dijo...

Quiero dirigirme a quien sustenta la autoridad efectiva aquí, soy consciente de que las aguas que yo veo fluir, no son las que ustedes ven, a pesar de que el agua como elemento es único.
Quiero disipar cualquier impresión de intercurrencia. estas aguas son espontáneas y no pretenden más que indicar el camino que acaban de recorrer desde la fuente. No saben con qué otras aguas confluirán, si es que eso sucediera, durante su camino.
Muchas veces, al observarles a ustedes, me pregunto si yo alguna vez fuí como ustedes. La respuesta no importa. Si cuando oía, veía a Peter, era auténtico. Si Peter es el mismo de siempre, entonces la equivocada era yo. Pero me temo que la respuesta aquí tampoco es importante conocerla. El caso es que veo un tremendo interés, como actitud, un cerrar filas, un querer guardar un nombre, una forma, y ambas cosas son hijas del tiempo. En cambio, sin nombre ni forma es el Tao, es tan simple, que me asombra el interés de una sociación, aunque sea la de San José, aunque sea la de La Virgen María, o aunque sea la de Jesucristo. Los masones tienen por patron a San Juan Evangelista. Desde que presentí ese interés en dejar huella, la forma y el nombre que tenía para mí, desapareció. Siento, sentí, que mucho había aprendido, realizado, pero lo fundamental, se había quedado sin realizar. Lo curioso es que lo puedo entender perfectamente, tanto la plenitud del antes, como el vacío del después. Mas ninguna de las dos cosas llegué a saber con posterioridad que eran primordialidad. Fué ese inmenso vacio el que con esfuerzo y trabajo, también, muestra de vez en cuando sus flores. Hay una cabezonería absoluta en no ceder en el empeño, lo que a veces me lleva a replantearme todo una y otra vez, incluso sin parar. Soy consciente de que Peter tiene gran personalidad, pero el está en la orilla parado y yo voy en el rio con las aguas. Solo hago que ir con las aguas
Gracias, Maribel y Joaquín, va por vosotros
Ana

Anónimo dijo...

Lo que no se ha desfigurado, desdibujado son sus palabras verdaderas cuando era su etapa de "arar el terreno", ahí enseñaba lo que sabía sin acepción de personas.
Los celos son naturales, no hay más que ver como forman parte de una fase de superación personal. Si yo, pretendo con otra persona "allanar" el terreno entre ambos, para así poder contactar en lo esencial, si como digo, lo hago yo porque es mi deseo y mi interés, hay una parte mía que pongo "a la intemperie", que será sometida a ciertos elementos, es mi apuesta y mi riesgo, porque sé, sin lugar a dudas, que la resultante, que el beneficio último va a existir. Cuando alguien pone todas las cartas sobre la mesa, será un contrincante mejor o peor, pero por lo menos las condiciones de partida son inmejorables, y en lo que toca a resultados obtenidos, depende de Dios. Y, si además, uno de los dos se considera un maestro, debe darle por lo menos una ventaja inicial compensatoria; esto, Platón lo describe cuando habla de las relaciones entre maestro y discípulo, lo que se puede y que resulta deseable que ocurra, así como que ese manto protector, qué implica y que no implica. He de confesar que parece que en ellos se daba una entrega también corporal que no forma parte de la mentalidad que yo conozco, pero aparte de eso, considerando lo intrínseco del hecho en sí, es completamente válido, y viene a querer decir que si se llega a una compenetración total, visto desde la diferencia de posiciones que comporta uno y otro, la entrega del alumno al maestro, es total, deseable, pero en modo alguno restrictiva respecto a limitativa para el discípulo, y que en cambio, como para el maestro conlleva una plenitud en si mismo, esto explicaría una amplitud de miras y de circunstancias en torno al discípulo, dicho en otras palabras, el maestro no es quien se pueda acordonar en torno a un discípulo entregado, porque el discípulo debe florecer en su momento y en su circunstancia. Yo aquí veo una clave, una luz

Anónimo dijo...

Y veo una clave y una luz porque confieso que lo mental ha de estar de acuerdo con lo corporal, y lo corporal es una resultante de lo espiritual, como lo mental también lo es. y además lo corporal también ha de dar su fruto, y ha de haber una flor, como dice Manel, de salvación de perdón y bondad él la saca del misterio último de la vida, bien, que así sea, eso se llama cuidar del manto de flores de María, donde ella y su fruto son una una ladera de nieve en polvo, blanda, mullida y templadita. Pero para mí, tengo que pensalo un poco como la quiero, todavía no lo sé, pero cuando lo sepa, no dudeis que os lo contaré
Bon Nàdal

Anónimo dijo...

Si, ya sé cómo quiero ver a María, como una mujer, mujer porque lleva consigo maternidad. Maternidad a todo y para ello, Ella es la tierra en la Tierra, y el brillo en la Luz. Pierde a su hijo y a cambio recibe a todos los hijos del mundo. Siendo hecha de tierra inmaculada se hace referencia universal y está impresa sobre la última realidad. Es la consoladora, no pretende otra cosa. Ella es el límite de los llantos de dolor, la puerta.
Está muy claro, el acto de pasar bajo el marco de la puerta es un acto voluntario de una individualidad que pasando deja de serlo.
Maria te dice a tí mismo que tu mismo eres el morador de la morada de la unidad.

Anónimo dijo...

Donde vivir es ser uno con los Tres, más Ella, mas todos los que te han acompañado siempre, por siempre y para siempre y donde el "aliento" (de alentar) no falta nunca, por parte de todos (por eso es unidad)

Anónimo dijo...

Además esto dicho arriba, son, por así decir, las coordenadas que necesitamos en el ahora para referenciarlo, pero en realidad esas coordenadas solo necesitamos referenciarlas aquí, allí, no son necesarias, y saber esto no es ninguna tontería, pues ya te está dando pié en el ahora, aquí, para probar las mieles, si tienes un mínimo para inteligenciar estas realidades tan ámplias sin quererlas reducir a tu propia medida individual