lunes, noviembre 24, 2008

Misa en el rincón - Noviembre'09


Misa en el Rincón el día 16 de noviembre del 2008-11-17


Homilía:
“…¿ qué relación tiene el aire con la Gracia, la energía con el Espíritu y la oración con la respiración?.
Así empezó su homilía nuestro padrecito Peter y continuó diciendo: esta es la unión del Taoísmo con el cristianismo. Pero lo más importante es que si no respiras no hay vida, si uno no sabe orar no siente la energía del espíritu.

La esencia es estar alegre en tu servicio, confiado en la vida, eso es vivir con gracia.


El mal viene de la acción humana, hechos, hechizos, mal pensar; por eso Tao es NO-ACCIÓN, Jesús en Nazaret pasó 30 años de no acción y cariñito familiar. Luego en los tres años de vida pública politiqueo y después paf, su muerte.
La pregunta es: ¿de dónde vienen el mal?.

Olfatear, sentir la peste del odio y la corazonada del Perfume de amor.
Hace 50 años del restaurante chino, pero sin dos mujeres conmigo no habría sido posible, Conchita y Margarita, su soporte. “




Así nos habló el padre, durante la comida pude estar a su lado, y me dijo que lo esencial es CARIÑITO FAMILIAR, que eso resume sus 30 años de trabajo en el Rincón, que de los capítulos de mi libro sobre el Tao de San José el nº 80 es el más importante, lo leí y me emocioné:

“el gozo de esta vida está en embellecer día a día tu Tesoro, y agradecido al Cielo respirar tranquilo su Perfume de Amor; la Sagrada Familia sabe que no hay necesidad de más.”

Cada cual ha de saber su cualidad, su Tesoro escondido, y ponerlo al servicio de todos, eso es el gozo de esta vida y justamente eso te da la paz que necesitas para vivir tranquilo; por muy difícil que todo se presente hay algo esencial que forma parte de ti y que te mantiene en paz, es tu Tesoro, multiplícalo y serás feliz.
Isabel Moreno

El dibujo de Isabel Moreno, corresponde al capitulo LXXX del Tao de san José


Refrán: Si no te gusta lo que recibes……. Revisa muy bien lo que estás dando.

13 comentarios:

Anónimo dijo...

MARIA, REINA DE LA PAZ

Queridos hijos de Medjugorje, ¡alabados sean Jesús y María!

1 – El 2 de octubre Mirjana recibió su aparición mensual en el Cenáculo, y luego transmitió el siguiente mensaje: “''Queridos hijos, hoy los llamo a una completa unión con Dios. Vuestro cuerpo está en la tierra, pero les pido que vuestra alma esté con mayor frecuencia en la cercanía de Dios. Esto lo lograrán mediante la oración, oración con un corazón abierto. Así ustedes agradecerán a Dios por la inconmensurable bondad que les da a través mío y, con sincero corazón, recibirán la obligación de tratar con igual bondad a las almas con que ustedes se encuentran. Gracias, hijos míos''.
Y Nuestra Señora agregó: "Ruego con el corazón a Dios para que les dé fuerza y amor a sus pastores, para ayudarlos en esto y para que los conduzcan".

Anónimo dijo...

y, con sincero corazón, recibirán la obligación de tratar con igual bondad a las almas con que ustedes se encuentran

Anónimo dijo...

el gozo de esta vida está en embellecer día a día tu Tesoro... ayer esta frase me respondio una pregunata que no me dejaba tranquila . como dar sentido a lo que vivo ? un instrumento solo es VALIOSO cuando es util . y al responder esto mi agitacion se esfumo poco a poco y sonrei . un abrazo .

Anónimo dijo...

esutil porque me hizo ver tu alma viendo a la vez la mía

Anónimo dijo...

PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO

¡Hola família! Que bueno es Dios que cada semana nos alimenta con el pan de su Palabra y nos hace crecer con el alimento de la eucaristía...
Que lo recibamos con un corazón agradecido.
Un fuerte abrazo. Francisca

3ª LECTURA: Mc 13,33-37
En aquel tiempo, decía Jesús a sus discípulos: “Estad atentos y vigilad, porque ignoráis cuándo será el momento. Al igual que un hombre que se ausenta: deja su casa, da atribuciones a sus siervos, a cada uno su trabajo, y ordena al portero que vele; velad, por tanto, ya que no sabéis cuándo viene el dueño de la casa, si al atardecer, o a media noche, o al cantar del gallo, o de madrugada. No sea que llegue de improviso y os encuentre dormidos. Lo que a vosotros digo, a todos lo digo: ¡Velad!»

COMENTARIO: “Estad atentos y vigilad, porque ignoráis cuando será el momento” El evangelio de hoy está centrado en dos imperativos: Vigilad, velad, porque no sabéis cuando es el momento. Enseguida les pone una pequeña parábola: “Al igual que un hombre que se va de viaje, y deja su casa y da a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara”
¿Que significará para nosotros esto de vigilar y velar? Quizá primero es un velar material, para poder vivir mejor lo espiritual, equilibrar la economía en este tiempo de crisis es muy importante, ya que carecer de ella produce muchos problemas que pueden influir en el equilibrio espiritual.
Dios se hace presente en todo lo que vivimos, vigilar para que esta presencia suya nos ayude a dar sentido a todo lo que hacemos, él vela y acoge nuestro trabajo. Velar para ir asumiendo con esperanza las contradicciones, las discrepancias, las impaciencias, las incomprensiones, de modo que se vayan creando relaciones nuevas. Vigilar y velar para buscar siempre la paz, primero la paz interior, y así poder ser personas tolerantes y creadoras de paz. Velar sobre los propios hechos y actitudes, para que no entren ni los celos, ni las envidias, ni los ocios…La vida espiritual requiere una gran finura y mucho cuidado, pero vale la pena por el gozo que da estar siempre acompañado por la fe.
Otra característica del adviento, es la esperanza, que será como la brújula que nos guiará todo el adviento. ¿Qué es lo que esperamos? Esperamos al que nos enseñará los secretos que desde una vida sencilla se puede construir la felicidad. Nos enseña a ser pequeños como los niños, tan pequeños como tú Jesús en el pesebre, tan pequeño e indefenso como estás en el sagrario, así de pequeño te revelas Jesús en el mundo. A un mundo que busca lo grande, que le cuesta ocupar los últimos puestos, que le gusta aparentar lo que no es ni tiene…¡Como nos cuesta entender que es la pequeñez lo que nos hace grandes! ¿Acaso no es el pequeño y el sencillo lo que más complace tu corazón?

Pregunta: ¿Qué es para ti el adviento? ¿Qué gracia le pedirías a Jesús En este adviento?

ORACIÓN: Señor, que nos hagamos tan pequeños, que podamos sentir tu abrazo y tu ternura de Padre. En el fondo somos como niños necesitado de cariño, haz que nuestro corazón sereno y tranquilo pueda descansar en paz.

Anónimo dijo...

Ya me he rendido, en el trabajo me he rendido. Aún no sé que camino lo llevará. Interiormente lo he decidido así, y, ahora "toca" hacerlo saber; hay una persona aquí que puede hacer o hace la función de mediadora, de defensor del diablo como ella dice. Se lo dije antes, es una psiquiatra, y dice, no hay causa médica que ellos puedan buscar, solo pueden decir que haces taichí...
Mañana tengo cita con ella

Ana

Anónimo dijo...

Isabel, me ha gustado lo que has escrito, porque el domingo no pude asistir, así que lo he vivido, casi, como si hubiese estado.

Lo que dice Peter, es cierto.Lo másimportante es mantener la serenidad o paz interior, no alterar la tranquilidad del alma, alejándola de su equilibrio natural.

Para sentirnos alegres y felices, antes tenemos que sentirnos seguros y no conformarnos con sentir la alegría dentro de nosotros, sino que hemos de procurar que aflore al exterior, contagiando a quienes nos rodean (si se dejan) con palabras, actitudes y gestos que les arrastren a compartirla.

Dices que Peter preguntó de donde viene el mal, la peste de odio. Yo creo que viene de la frustración; es lago enfermizo, crónico. Del no saber cambiar nuestras actitudes depimentes, negativas y derrotistas, por otras entusiastas, positivas y esperanzadoras. Y, sobre todo, de estar todo el santo día dándole a la cabeza, con pensamientos negativos.

Lo cierto es que "la peste de odio" nos acelera el ritmo crdíaco, nos arruga el rostro, envilece el alma, ahuyenta la paz y fastidia a los que están a su lado. Predispone a riñas y peleas perturbando el cariñito familiar, pagándolo siempre el más débil.

Como diría Peter: RESUMIENDO hay que vivir con gracia, sino... desgraciado.

HILDA

Anónimo dijo...

Cuando se vive sin nada atrapar ni retener (solo es palabras, lo sé, solo las utilizo) se producen las mismas tensiones que cuando mucho se atrapa y se retiene. Me explico, estar fuera de lo "establecido" es mal catalogado, por de pronto, las costumbres son poderosos jueces. Cuando se te ubica en unas coordenadas, no se olvide quien es quien tiene solo la facultad de hacerlo. Me he pasado la mayor parte de la vida preguntándome e intentando responderme, ahora solo soy, y no he de tener más remedio que aceptar lo que viene; y lo que viene, se puede decir que eso es lo que estoy haciendo, sin finalidad alguna, sin intentar rechazarlo ni tampoco lo contrario. A nivel familiar, también ha sido así, lo que conoceis, lo que os parece conocer, pues así ha sido también; lo he cogido al hombro, y todo lo llevaba ahí, hasta que dejó de pesar y sonriendo por dentro y por fuera les he ido "ganando", pero de la forma auténtica, no por lo convencional (queda y queda por recorrer aún) Si separo tánto estos dos términos es porque ahora eso es lo que ha de quedar más claro, hay lo auténtico y lo que no lo es
Ni mucho menos que nadie, todo me carece de mérito alguno, lo favorable que solo quien lo descubre lo nota, ha venido de la mano y puesto en bandeja; Dios me ha bendecido, al haberme dado un auténtico Maestro en el sentodo más interior de la palabra
Ana

Anónimo dijo...

Regreso de yoga, aquí en el pueblo no hay un grupo de taichí potable, que yo sepa, y además este yogui, que lleva en esto desde el año 1974... conoció a Peter y al Rincón y se ha emocionado con el libro del Tao de San José,compartimos una fe y unas vivencias, son muchas coincidencias.
Durante estos años he dado técnica vocal y respiratoria, con un sentido muy espiritual, a grupos e individualmente, pero nunca había recibido y menos compartido la experiencia en grupo; es una delicia:lo que dice el yogui para introducir la clase, el desarrollo de cada asana, la profundidad y verdad con la que habla; él es otro Peter, pero a lo occidental , que no chino, sino más serio y menos jocoso, y nada preguntón, más detenido; se asemeja más a un monje, a un asceta o anacoreta.

Somos unas 12 mujeres en clase, y el lugar es una delicia, una rectoría de pueblo, con sus campanas dando las horas,situada una zona elevada llena de ároles,junto a su iglesilla románica llena de aromas del tiempo detenido, así que cuando sales con los pulmones limpios y llenos de aire renovado, lo que respiras es pura vida, sin más.Qué noches de frío y viento, pero cuánta limpieza en el firmameto, qué lucerillos temblones lo alumbran y cómo se va durmiendo la noche, mientras mi amiga y yo bajamos traqueteando cuesta abajo dichosas por lo compartido.

Al llegar a casa me sobra todo, suelo sentarme mirando el mar sin encender las luces siquiera, que nada interrumpa el encuentro conmigo y lo más hondo y bello que siempre me acompaña. Silencios. Sólo me apetece al poco escribiros, y es que en la distancia estais muy cerca mío.

Fuerte abrazo de buenas noches a todos.

Isabel Moreno

Anónimo dijo...

BUENAS NOCHES, ISABEL. DISFRUTA DEL MAR, TU QUE PUEDES.

HILDA

Anónimo dijo...

Buenos dias, blogeros, no tengo nada que contar, es solo un amanecer al blog
ANA

Anónimo dijo...

UNA IGLESIA DESPIERTA

Las primeras generaciones cristianas vivieron obsesionadas por la pronta venida de Jesús. El resucitado no podía tardar. Vivían tan atraídos por él que querían encontrarse de nuevo cuanto antes. Los problemas empezaron cuando vieron que el tiempo pasaba y la venida del Señor se demoraba.
Pronto se dieron cuenta de que esta tardanza encerraba un peligro mortal. Se podía apagar el primer ardor. Con el tiempo, aquellas pequeñas comunidades podían caer poco a poco en la indiferencia y el olvido. Les preocupaba una cosa: «Que, al llegar, Cristo no nos encuentre dormidos».
La vigilancia se convirtió en la palabra clave. Los evangelios la repiten constantemente: «vigilad», «estad alerta», «vivid despiertos». Según Marcos, la orden de Jesús no es sólo para los discípulos que le están escuchando. «Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: Velad». No es una llamada más. La orden es para todos sus seguidores de todos los tiempos.
Han pasado veinte siglos de cristianismo. ¿Qué ha sido de esta orden de Jesús? ¿Cómo vivimos los cristianos de hoy? ¿Seguimos despiertos? ¿Se mantiene viva nuestra fe o se ha ido apagando en la indiferencia y la mediocridad?
¿No vemos que la Iglesia necesita un corazón nuevo? ¿No sentimos la necesidad de sacudirnos la apatía y el autoengaño? ¿No vamos a despertar lo mejor que hay en la Iglesia? ¿No vamos a reavivar esa fe humilde y limpia de tantos creyentes sencillos?
¿No hemos de recuperar el rostro vivo de Jesús, que atrae, llama, interpela y despierta? ¿Cómo podemos seguir hablando, escribiendo y discutiendo tanto de Cristo, sin que su persona nos enamore y trasforme un poco más? ¿No nos damos cuenta de que una Iglesia «dormida» a la que Jesucristo no seduce ni toca el corazón, es una Iglesia sin futuro, que se irá apagando y envejeciendo por falta de vida?
¿No sentimos la necesidad de despertar e intensificar nuestra relación con él? ¿Quién como él puede despertar nuestro cristianismo de la inmovilidad, de la inercia, del peso del pasado, de la falta de creatividad? ¿Quién podrá contagiarnos su alegría? ¿Quién nos dará su fuerza creadora y su vitalidad?

José Antonio Pagola

Red evangelizadora Buenas Noticias
1 Adviento (B)
Marcos 23, 33 - 37

Anónimo dijo...

Hace tiempo que no sale José, el esposo de María en los comentarios. El dibujo de esta semana nos lo recuerda, qué cómoda y satisfecha va María (un nñito aunque sea pequeño, pesa, bueno, por lo menos, aunque José no hiciera otra cosa, estar junto a María para llevar al niño, para mí que es suficiente! y mientras, María va caminando, pegadita a ellos, mirando al nño y mirando a su alrededor, y es que LO TIENE TODO; en la cercanía es donde se siente como es el cariñito familiar, la verdadera familia. Así los corazones no se autoengañan, hay que ser "un poquitín valientes", probar en la cercanía, sentirse a gusto con el propio corazón y atraer hacia sí el calorcito, todo calorcito, y danzar al son del dulce calorcito

Ana